La mítica sala del viaducto vuelve a encender las luces y su sistema de sonido para ofrecer un espacio dedicado al house, el funky, la música disco y afroamericana en el céntrico barrio de La Latina de Madrid.
Marula es toda una festividad. Lo hace con unos nuevos dueños al mando y bajo un nuevo nombre: Marula Club Madrid. El espacio fue uno de los primeros en verse obligado a cerrar y por ello ahora, el clubbing está de enhorabuena.
La sala anuncia una pequeña serie de retoques estéticos y sonoros, pero sobre todo, manteniendo su magnética esencia y su programación basada en estilos como el funky, el house, o el disco. Y por supuesto, la escena afroamericana, de la que fue centro neurálgico.
Y es que, este maravilloso espacio íntimo y céntrico se ha convertido durante casi dos décadas en ese lugar donde la música y la buena vibra no entienden de límites. Donde un público de una diversidad infinita disfruta de una personalidad sonora preciosa.
¡Que no pare le música de miércoles a domingo!
La oferta musical de Marula Club se dividirá según su hora de apertura. Durante las noches, que mantendrán las sesiones de DJs, se volverá a contar con muchos de los artistas que auparon al Marula a ser uno de esos garitos que te hacen sentir como en casa, con una selección musical que quita el habla como JaviFrías, SimónGarcía o Wiggler. También con residentes de potentes fiestas y colectivos como Daniel Träumt, GTA o CarlaLuque, o David Kano como residente cada miércoles, así como nuevas caras de la noche madrileña.
Muy pronto, además, se empezará a contar con artistas internacionales para enriquecer aún más su propuesta.
Por las tardes y desde los miércoles se retomarán también los conciertos, y de hecho, la organización ha hecho un llamamiento a todos aquellos grupos y bandas que deseen tener un lugar en el que hacer disfrutar con su magia y arte. Reservando los domingos por la tarde para culminar la semana con distintas propuestas musicales como soul, r&b, jazz o lives de electrónica.
Revivir el sentimiento familiar, cercanía desde el personal al público
Además, Marula Club ha querido apostar por precios que inviten a una asistencia continua. Salvo en días que vengan artistas internacionales, y por razones obvias, el precio de la entrada se mantendrá a su histórico. Con ello se pretende huir de la burbuja de precios que se ha creado post pandemia. Una apuesta por reavivar el sentimiento familiar que caracterizó a estas cuatro paredes que tanto bueno aún tiene por ofrecer.
Vicious.