El sastre del frío.
Pedro Gómez comenzó su andadura en el sector textil como aprendiz de sastre. Su pasión por los deportes de montaña y la necesidad de protegerse de las bajas temperaturas, hicieron que comenzara a desarrollar unos sacos de dormir rellenos de pluma, que marcarían para siempre la historia del equipamiento de montaña. El éxito de estos sacos sorprendió desde el principio y se fue consolidando a medida que los perfeccionaba año tras año, incorporándoles las más avanzadas innovaciones técnicas.
Posteriormente, siguió diseñando nuevas prendas entre las que destacaron sus icónicos plumíferos, en los que gracias a su origen y su marcado ADN de sastrería clásica, ofrecía la posibilidad de personalizarlos. Toda una novedad que inmediatamente derivó en una verdadera revolución para este tipo de prendas.
Hoy en día son Zape y Virginia, buenos amigos de Kano, quien tienen la patente y desarrollo de la legendaria marca.